A Hard Rains's A-Gonna Fall cantaba Bob Dylan, ya en el año 1962, en los comienzos de su andadura musical...
Una lluvia muy fuerte, ácida, que va a caer... Y que está cayendo más de 50 años luego de que la profetizara el irrepetible cantautor de Minesota. Sobre la Iglesia, decrépita, mundana y llena de jerarcas hipócritas. Sobre la Iglesia, sí, que también en la actualidad tiene pastores, ciertamente, ocupados en hacer el bien, es decir, en predicar con celo ejemplar el Evangelio, y vivirlo. Nunca ha dejado de tenerlos, ni dejará de tenerlos; suponer que dejará de tenerlos es aceptar que Cristo mintió cuando prometió a sus seguidores que Él siempre estaría con su Iglesia hasta la consumación de los tiempos.
Una lluvia muy fuerte, ácida, que va a caer... Y que está cayendo más de 50 años luego de que la profetizara el irrepetible cantautor de Minesota. Sobre la Iglesia, decrépita, mundana y llena de jerarcas hipócritas. Sobre la Iglesia, sí, que también en la actualidad tiene pastores, ciertamente, ocupados en hacer el bien, es decir, en predicar con celo ejemplar el Evangelio, y vivirlo. Nunca ha dejado de tenerlos, ni dejará de tenerlos; suponer que dejará de tenerlos es aceptar que Cristo mintió cuando prometió a sus seguidores que Él siempre estaría con su Iglesia hasta la consumación de los tiempos.
Esto es: la Esposa de Cristo, que es su Cuerpo Místico, sacramento de salvación para nuestro mundo, tiene evangelizadores, militantes fieles al Evangelio, al Magisterio y a la Tradición. Porque Cristo siempre “se reserva” un puñado de fieles “incondicionales”.
Pero por desgracia, la Iglesia católica está saturada de funcionarios, siguiendo el curso (o a la luz de) de las palabras del papa Francisco en su predicación matutina: misa diaria en Santa Marta.
Recuerdo a este respecto un examen de acceso para una plaza que surgió en una escuela católica “descatolizada”, como es común en las escuelas católicas de hoy día, casi todas descatolizadas, o sea, católicas solo de nombre, honrosas excepciones aparte.
Ninguna pregunta del examen, absolutamente ninguna, tenía nada que ver, ni remotamente, con la fe militante católica por el Reino de Dios y su Justicia. Ni una sola. Y esto es tan dramático como lógico: si hubiera preguntas militantes y sobre todo se exigiera ser militante para poder permanecer en la Iglesia “sin trepar, sin figurar”, actitudes que tanto disgustan al santo padre Francisco, muchos de los “enchufados y burócratas tibios que no dan la talla” deberían ser puestos en la inhóspita calle, no pocos curas y obispos incluidos, y la inmensa mayoría de los educadores de la escuela descatolizada, de los profesores de Religión católica para la escuela pública, la mayoría de los profesores y profesoras de las facultades teológicas... Y no me extrañaría nada que también el señor encargado de poner el examen al que me refiero.
Y es que está así casi todo en esta Iglesia de la Demolición, o sea, Mundanizada, esto es, asechada por Satanás, que ha entrado a saco en Ella, a lo bestia. Porque lo que parece que estamos viviendo es la Gran Apostasía, que anuncia la consumación de los tiempos, la Parusía...
10 de junio, 2014. Luis Henríquez Lorenzo: profesor de humanidades, educador, escritor, bloguero, militante social.
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