martes, 5 de julio de 2016

"Dios escribe derecho con renglones torcidos"

Bueno, a ver, más despacio, y vamos con una perplejidad de mi asombro o autoría sobre unas polémicas declaraciones del cardenal italiano Gianfranco Ravasi, quien no debe ser precisamente un donnadie en la Iglesia, al menos como intelectual, pues no en vano es el actual prefecto del Pontificio Consejo para la Cultura, por más que en laImage result for masoneria Iglesia el carrerismo, el afán de poder y el nepotismo están a la orden del día, todo lo cual provoca que "ni sean todos los que están ni estén todos los que son": a buen entendedor... Si en su vida espiritual como discípulo de Cristo e hijo de la Iglesia es un mediocre, un apóstata, un hipócrita, ni me compete a mí el descubrirlo y determinarlo -y ciertamente no es prudente ni delicadamente cristiano el juzgar así al cardenal-, ni sería, en modo alguno, el asunto de esta breve reflexión mía. Sabido es que la Iglesia católica, fundada hace 2.000 años por Jesucristo sobre la roca de Pedro (cfr. Mateo 16, 18-19), padece en la actualidad una de las peores crisis habidas en su bimilenaria historia: la apostasía de muchos de sus hijos e hijas, especialmente puesta de manifiesto en la actuación de no pocos de sus pastores, quienes, como habría vaticinado una visionaria como la beata alemana Ana Caterina Emmerich, "ya no se ocupan de agradar al Señor, de evangelizar, de salvar almas, y sí de pactar con el mundo, de agradar a los poderosos de este mundo que sigue odiando a Cristo y...". Como si se cumplieran las Escrituras: una dramática y desoladora apostasía pondrá a prueba la fe de los fieles, obispos contra obispos, confusión doctrinal, innúmeras heterodoxias, espíritu mundano incrustado en el corazón mismo de la Iglesia (el "mundanismo que ha penetrado hasta el cenáculo", en expresión de ese gran místico de nuestro tiempo que se llama Marcelino Legido). Image result for masoneria

En efecto o así las cosas, el cardenal Ravasi propone que la Iglesia pueda dialogar con la masonería, pues aquella y esta comparten valores comunes: el sentido de la comunidad, cierta idea confluyente de la beneficencia y el bien común, la crítica al materialismo, la defensa de la dignidad de la persona.

Con el permiso del antiesclavista, activista social, político y masón estadounidense Abraham Lincoln (en verdad, Abraham Lincoln fue masón de intención, deseó ingresar en la masonería, pero al parecer, por conveniencias políticas partidistas renunció finalmente a ingresar en una de las logias en que había previsto ingresar), en menudo charco lleno de lodo se mete este cardenal. Siendo quien es, es imposible que desconozca las reiteradas condenas, sin fisuras, sin el menor asomo de duda, del Magisterio a la masonería; durante el siglo XVIII, ya algunos papas se pronunciaron y muchos prelados católicos, y no digamos durante el siglo XIX, con condenas que culminan en la que tal vez sea la carta magna de las condenas pontificias a la masonería: sí, nos referimos a la encíclica de León XIII Humanum Genus. En este documento publicado en el año 1884, el gran Papa impulsor de la Doctrina Social de la Iglesia, el más prolífico en escribir encíclicas y el primero en aparecer filmado en un corto del recién inventado cinematógrafo por los franceses hermanos Lumière, sin mayores rodeos enseña que existe el Reino de Cristo y el Reino de Satanás; sirven a este último, todos los que viven como si Dios no existiera, y también los que plantean una vida contra Dios. Todas estas enseñanzas en la línea de la agustiniana concepción del mundo como ciudad de Dios o ciudad celestial o como ciudad terrenal o mundana que se autoafirma desde el rechazo a Dios.Image result for masoneria

"Desde fuera", o sea, desde el escaso conocimiento que yo mismo tengo de la vida de alguien como Abraham Lincoln, cabe empero afirmar que es más lo positivo que lo que hubo de negativo en el pensamiento y en el actuar activista y político del ciudadano Lincoln, artífice de la abolición de la esclavitud de las personas de raza negra en América. Reconocido esto, me parece que se puede entender al menos un poco la postura del cardenal italiano Ravasi sobre el diálogo entre Iglesia y masonería. Aquella condena a esta última, los documentos papales están ahí, no se puede ser masón y católico a la vez: el Código de Derecho Canónigo establece que un católico cae en excomunión automática si ingresa en la masonería, con lo cual tampoco podría acceder a los sacramentos si es formal y oficialmente masón... Con todo, me quiero figurar que lo que no se le impide a un católico es apreciar el legado (en lo que tiene de bueno, justo, loable, noble, humanista, saluable, artístico, según exhortación del propio san Pablo, apóstol de los gentiles...) de W. A. Mozart, Beethoven, G. Washington, Benjamín Franklin, F. Liszt, Abraham Lincoln, José Martí, Louis Armstrong,  y tantos genios de la literatura, las artes, la ciencia, la política y el pensamiento que en vida fueron masones.Image result for masoneria
 
Dios escribe derecho con renglones torcidos... Quiero indicar con el recurso a este conocido acerto exactamente lo siguiente: los eclesiásticos mexicanos Francisco Hidalgo (el cura Hidalgo) y José María Morelos, amén de eclesiásticos ilustrados,  militares insurgentes y patriotas de la lucha mexicana por la independencia de la Corona española, se vieron influidos por las doctrinas masónicas, se dejaron penetrar en mayor o menor medida por las citadas, y habiendo tenido problemas con la vivencia de su condición de clérigos (especialmente Morelos: este llegó a tener siendo religioso y sacerdote hasta 4 hijos naturales), por todo lo cual fueron acusados de herejes y apóstatas, sin embargo contribuyeron decisivamente a la independencia de México, independencia que hoy se considera un bien nacional.Image result for el cura hidalgo
 
Image result for leon xiiiEn definitiva: Francisco Hidalgo y José María Morelos en su paso por este mundo igual cometieron muchos errores y consintieron debilidades y pecados de todo tipo o del tipo que fuera (y si en verdad abrazaron los ideales masónicos, tan en ebullición tras las huellas del Siglo de las Luces, la Revolución Francesa y las luchas independentistas de las posesiones españolas en América, más culpa pudieron añadir a sus vidas), solo que también contribuyeron decisivamente a alumbrar un proceso como el de la independencia mexicana, el cual, digámoslo de una manera que pudiera parecer un tanto hiperbólica, es tenido por la práctica totalidad de los mexicanos como un sumo bien terrenal, hoy por hoy, para un país hermano como México. Como si Dios al cabo sacara un bien de cualquier mal inicial...
 
 
24 de julio, 2016. Luis Henríquez Lorenzo: profesor de Humanidades, escritor, bloguero, educador, activista social.  
 
 
 

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