lunes, 7 de enero de 2019

"En la res pública española" Lo que pasa en la calle (frente a los sucesos consuetudinarios que acontecen en la rúa) Juan de Mairena, Antonio Machado El franchute Manuel Valls (este individuo es franchute; una santa y heroína como Juana de Arco, no, sino francesa y a mucha honra) fue Gran Oriente de la Francmasonería desde el año 1989 al 2005. Y actualmente es el candidato a la alcaldía de Barcelona por Ciudadanos, nombrado directamente a dedo por Albert Rivera.


Así que ojo: la Francmasonería siempre ha tramado contra los intereses de España. Y por lo que toca a
Ciudadanos, partido veleidoso donde los haya, ha demostrado ser sobre todas las cosas una mafia de oportunistas, de veletas sin principios aglutinados en torno al gran timonel veleta de Alberto Rivera, el guapotito ególatra al servicio de los intereses globalistas del siniestro y demoniaco George Soros y de la ideología marxista (o marxiana): "Estos son mis principios; si no le gustan, tengo otros". Ambos, Manuel Valls y Alberto Rivera, invitados al Club Bilderberg (gobierno del mundo en la sombra, en claves globalistas por sionistas, masónicas y neomarxistas), y empeñados en hacer de Ciudadanos una suerte de nuevo PSOE.Resultado de imagen de francmasoneria Mientras tanto, ese macarra, traidor a la patria, falso doctor, académicamente hablando (doctor cum fraude, Falconetti que se baja del Puma para montarse en el Falcon, y viceversa o tiro porque me toca) y falso socialista por insolidario llamado Pedro Sánchez, sigue hurgando en la ruina moral y económica de España, que el susodicho y su equipo de Gobierno juntamente con todos los gerifaltes sociatas no hacen sino agravar y agravar solo Dios sabe hasta dónde y hasta cuándo. Panda de indeseables: Ábalos (qué tipejo es el sujeto este, qué necio, qué sectario, qué lameculos, qué imbécil; un tipo que fuera de la política partidista dudo mucho que pudiera trabajar en algún oficio), Cármenes Calvos o Calvas y otros corruptos sociatas de igual jaez, malvados, sinvergüenzas que carecen de ideales que no pasen por la defensa de sus intereses solo partidistas por más que voceen el mantra o bla bla bla (vamos, cínica falacia, premeditada demagogia) de la justicia social, que por supuesto jamás ponen en práctica, ¡panda de ladrones el PSOE con ese gran cleptómano a la cabeza, Juan Negrín, el más osado ladrón de Estado en toda la historia de España, solo ligeramente por delante del otro gran cleptómano, el también sociata Indalecio Prieto -muy probablemente, el organizador del asesinato del líder de la derecha José Calvo Sotelo, a escasos días del Alzamiento-, a quienes no les tembló el pulso a la hora de robar incluso las humildes posesiones de la clase trabajadora depositadas en los montes de piedad y cajas de ahorro de la época! Así, ese sujeto siniestro llamado José Bono, ultramillonario manchego que ha amasado una inconmensurable fortuna protagonizando trampas, chanchullos, corruptelas y pelotazos, y quien se permite acusar a Vox de ser "lo más oscuro y cutre de España", cuando lo innegablemente más cutre, siniestro y perverso y podrido de España es que un sujeto como este no esté, como poco, procesado por chorizo manchego. Por no hablar de los del Partido Popular con sus nuevos aires de "renovación", más falsos que un duro de cuatro pesetas . Farsantes, ¿a quiénes pretenden ustedes engañar? La sombra de Mariano Rajoy, verdadero sepulturero del PP, es tan alargada, que ustedes, peperos, a pesar de la carita de niño bueno de Pablo Casado, el nuevo líder, no van a cambiar ni un ápice de la política ideológica de la PSOEZ: ni memoria histórica, ni violencia de género, ni acérrima defensa de la unidad de España frente a los separatismos vasco y catalán, ni decidida oposición a las políticas globalistas, ni voluntad de abolir la ley del aborto...¡Ustedes, con mayoría absoluta de Mariano Rajoy, no cambiaron ni una coma siquiera de estas inicuas leyes liberticidas sociatas! De modo que ahora, a estas alturas de la película, ¿a quiénes pretenden engañar los Feijoo, Maroto y compañía?, ¡si todos ustedes en la última convención del PP acabaron aplaudiendo a Mariano Rajoy, el sepulterero del PP, el cobarde que dejó vía libre para que llegara a La Moncloa el falsario e inútil okupa de Pedro Sánchez, no en balde llamado chulo puta por Enrique de Diego! Ni del Cabildo de Gran Canaria, capitaneado por el nacionalista asambleario (¿?) Antonio Morales (en verdad, excomunista racauchutado): esa fantasmada en que se ha convertido Nueva Canarias, con el apoyo de sociatas de la PSOEZ y de partidarios de la mugre podemita; tan fantasmada, que hasta pretenden tomarnos por idiotas con el asunto del trato de favor concedido a la familia política del juntaletras y trepilla de Román Rodríguez en la compra cabildicia de un latifundio sito entre los municipios de La Aldea de San Nicolás y Santa Lucía de Tirajana. Mirando más o fijamente a la izquierda (pseudoizquierda, claro, o izquierda sectaria y totalitaria), ese niño probeta llamado Iñigo Errejón hace las maletas con que alejarse de Podemos para salir al encuentro de Ahora Madrid abrazando los años y el regazo de la abuelita lobo (también llamada Manuela Carmena).


Sin duda, lo mejor para España no puede ser sino el ir corriendo a toda esta tropa de la vida política, juntamente con toda la cloaca podemita y sociata. Porque no hay color: con el permiso de las pequeñas organizaciones identitarias y patriotas (Democracia Nacional, Somos Identitarios, Soluciona, Alternativa Española, etcétera), en España actualmente solo hay dos partidos políticos: Vox, de una parte, y de otra, el resto.
22 de enero, 2019. Luis Henríquez Lorenzo: profesor de Humanidades, educador, bloguero, escritor, militante social.

jueves, 3 de enero de 2019

"Ladran, luego cabalgamos"




El periodista y ensayista Enrique de Diego, siempre combativo o militante como católico en versión identitaria y patriota, en un ultimísimo artículo salido de su acerada pluma ("Podemos ha perdido el Oremus": Rambla Libre, 3/1/2019) sostiene sobre Podemos contundencias como las que siguen:



Podemos es un partido en demolición. Es una farsa que ya no engaña a nadie. Todas las encuestas, con la escasa credibilidad que me merecen, dan una caída imparable de Podemos, por cuyos círculos ya no pisa nadie a perder el tiempo. Lo que indican las encuestas es que el botín electoral podemita será menguante hasta el mínimo y entonces será el llanto y crujir de dientes porque estos vinieron a colocarse e instalarse, que lo explicó muy bien el de las becas black Iñigo Errejón, que había que pillar cacho presupuestario y chupar la sangre del contribuyente como parásitos.

Podemos son los comunistas de siempre con mucho adobo de estupidez irrestricta, en un combinado estomagante. Son cuatro profesoruchos de esa escombrera que es la Facultad de Políticas de la Complutense, donde huele a porro que tira para atrás, con ínfulas de burgueses y marqueses de Galapagar y otros cantantes frustrados de rap y showmans sin gracia.


Y además están desplegando su totalitarismo consustancial al código genético, al ADN de la mayoría de las organizaciones de izquierda: la democracia es válida y buena si ganamos y mandamos nosotros, si ganan los que son de los nuestros; si ganan y mandan los otros, los que no son izquierdistas, entonces la democracia es que está secuestrada por los fachas, neofranquistas, fascistas, facinerosos y extremistas de derechas, y justamente a esa democracia secuestrada hay que combatirla y al cabo rescatarla armando follón y escándalos y altercados en manifas en las calles y por supuesto en las instituciones, donde sea.


Solo que el éxito de Vox está ahí, incontestable: 12 diputados en las elecciones andaluzas del 2 de diciembre. Y lo que aun es más: si algunas encuestas pronostican que Vox podría alcanzar entre 40 y 50 diputados en el Congreso de la nación, a nadie debiera extrañar el súbito nerviosismo que parece haberse apoderado de podemitas y demás familia izquierdista totalitaria, sectaria y separatista. Image result for partido  podemos


Que se lo pregunten, si no, a la podemita andaluza Teresa Rodríguez, la siempre novia del alcalde gaditano el Kichi, quien, ni corta ni perezosa, se ha lanzado a espetar contra la organización presidida por Santiago Abascal lo que viene a ser una penosa descarga de calumnias, al calificar a la citada organización política de "cómplice de los asesinatos vinculados a la violencia machista". 


Calumnia, que algo queda. Solo que lo cierto es que Vox nunca ha emitido o formulado propuesta alguna desde la que propiciar situaciones de desprotección de las mujeres, y sí más bien todo lo contrario. De suerte que pretender modificar la actual ley de violencia de género -descaradamente escorada hacia los postulados de la totalitaria, anticristiana, perniciosa y poco científica ideología de género- por otro marco legal que contemple la realidad de una violencia allende el sexo de las víctimas, esto es, una ley de violencia intrafamiliar (violencia del hombre contra la mujer, de esta contra el hombre, de este contra sus hijos, de estos contra sus progenitores, de estos contra los más ancianos de la casa...), es una iniciativa no solo legítima sino más justa y necesaria que la ley actual. 


Empleando un término tan caro a la pedagogía moderna, diríamos que la propuesta de Vox es de hecho más transversal que la actual ley de violencia de género, y sin duda mucho más respetuosa con la noción de familia entendida como alianza de amor entre un hombre y una mujer; noción esta que queda desfigurada desde la perspectiva o dinámica de la ideología de género. Ideología de género que lleva 14 años en vigor, y lo cierto es que en este tiempo las muertes de mujeres a manos de sus parejas no solo no han disminuido sino que han aumentado ligeramente, se entiende que en comparación con períodos anteriores. Aunque esto sí: un buen número de colectivos feministas (no pocos de los mismos vinculados al PSOE) se han venido claramente enriqueciendo con las pingües subvenciones concedidas por la Administración a la causa de la llamada violencia de género, violencia amparada en una ley que criminaliza y deja en clara indefensión al hombre, sobre todo al varón occidental y de raza blanca. 


Si además consideramos que Vox defiende la cadena perpetua y la prisión permanente revisable para los delitos más graves (terroristas, asesinos convictos y confesos, violadores...), ¿a qué se pueden deber esas críticas desaforadas de la izquierda si no es a mala fe, a deseo de hacer daño, al ruin propósito de intoxicar a la opinión pública y a la ciudadanía? 


Desde luego, los podemitas son especialistas en esconder la cabeza como el avestruz o en girarla para el otro lado cuando toca condenar los atropellos contra la libertad personal y los derechos humanos perpetrados por una narcodictadura como la de Nicolás Maduro en Venezuela -no lo olvidemos, el gran valedor de Podemos a escala internacional-, solo que no pierden la ocasión de practicar uno de sus juegos de pim pam pun favoritos: "Vox fascista, Vox extrema derecha, la democracia española no debe tolerar los nuevos fascismos representados por organizaciones como Vox, y bla bla bla".


De modo que en la recta final de esta breve reflexión, ni falta hace que sentencie que mi deseo sobre el porvenir de Podemos (presente y futuro inmediato) es del todo similar al que emite Enrique de Diego: Podemos, que se vaya yendo (diluyendo) por el sumidero de la historia...


3 de enero, 2019. Luis Henríquez Lorenzo: profesor de Humanidades, educador, bloguero, escritor, militante social. 











jueves, 6 de diciembre de 2018

"Los viejos odios, las viejas hordas totalitarias de siempre" 





La imbecilidad urbanitas del animalismo está empeñada en prohibir la pesca en todas sus formas y variantes (incluida la acuicultura, que tantas posibilidades económicas cifradas en miles de puestos de trabajo ofrece a Canarias); la caza, también en todas sus variantes e incluso en el caso de que las piezas cazadas se destinen el consumo humano en centros asistenciales; la ganadería; el pastoreo; la apicultura; el arrastre con ganado; la colombofilia; la colombicultura; el silvestrismo; las carreras de galgos; la tauromaquia; las peleas de gallos; la crianza de aves de corral; los circos con animales; los perros y renos como fuerza motora para los trineos de esquimales, y las vacas y bueyes también como fuerza motora en las romerías; los dromedarios como atracción turística en Timanfaya (Lanzarote) y en Maspalomas (Gran Canaria); los zoológicos y acuarios; el adiestramiento de perros como lazarillos y para el rescate de personas víctimas de desgracias naturales... 


Dos de las últimas extravagancias de esta tropa de alucinados totalitarios, hijos del marxismo cultural y tontos útiles a los dictados del NOM, son estas: desterrar de nuestro acervo léxico expresiones como "matar dos pájaros de un tiro", "coger el toro por los cuernos", "fueron felices y comieron perdices", entre otras, por considerarlas ofensivas para la dignidad y los derechos de los animales; y dos, prohibir que los pastores usen perros para el pastoreo de sus ganados de ovejas y cabras; prohibición que llevaría fulminantemente a la ruina o desaparición definitiva de una práctica milenaria que acompaña al hombre desde antes incluso de aparecer el Neolítico y que, por ende, atesora tantos valores: humanos, históricos, éticos, ecológicos, rurales, antropológicos, económicos, familiares, religiosos incluso, asimismo artísticos... 


Con todo, del animalismo no quería ocuparme en este escrito, solo que valga lo que valga el apunte precedente. Y sí (ocuparme) de esto: como de costumbre, el seudosocialista, necio, sectario, mentiroso compulsivo y corrupto José Luis Ábalos, ante la debacle de la PSOEZ en Andalucía (convertida durante casi 40 años en cortijo particular de estos desalmados traidores al socialismo y a la clase obrera, convertida en un estercolero de corrupción clientelar socialista) y el espectacular ascenso de Vox, no tiene más argumentos que acusar al partido de Abascal de "facha, extrema derecha, fascismo...". Práctica que también perpetran el fraudulento e insustancial Pedro Sánchez (alias Falconetti según Jiménez Losantos, chulo puta y macarra según Enrique de Diego, indigente mental según el tinerfeño Pepe López) y la hipócrita omaíta Susana Díaz, la dueña del cortijo. 


Este que sigue es el sujeto Ábalos, vividor seudosocialista, farsante de tomo y lomo, retratado aquí y ahora por Enrique de Diego: 



He dejado que el sol se pusiera sobre mi estupor ante la cantidad de sandeces que has evacuado, José Luis Ábalos, en Paterna, mostrando tu supina ignorancia y tu superlativa hipocresía. Luego iremos a esa patraña de Paterna, otro engañabobos del pilla pilla presupuestario. Siendo del PSOE que es un partido en el que todos eran asesinos y genocidas y que ha dado algunos de los mayores criminales de la historia de España como Agapito García Atadell, Ángel Galarza o Santiago Carrillo no sólo tendrías que ser muchísimo más humilde, abandonando tu fatua flatulencia verbal, sino que deberías pasarte el resto de tus días pidiendo perdón a todos y cada uno de los españoles.

Dejo al margen lo que de chorizo tienes, con la sede de tu ONG; eres un completo inútil, como el chulo puta de tu jefe, ¡vaya par de dos! Antes de lanzar una medida política, soplagaitas, pedazo de incompetente, hay que estudiar los temas y moverse dentro del terreno de lo posible que es el que marcan las leyes. Lo de profanar la tumba de Franco no es más que el voluntarismo de unos acomplejados golpistas con pulsión de tiranos. Os habéis metido en un callejón sin salida, en un atolladero y vais a terminar entrando en el terreno del delito y se percibe en lontananza para vosotros ir a hacer compañía a Junqueras, al que tanto amáis. Así que ahora toca criminalizar a la familia Franco con la impronta chequista que nunca habéis abandonado. Has pedido a la familia Francohumildad”, cuando están dando un ejemplo patente de templanza, ante tanto desatino y tanta estupidez. Incluso te has atrevido, bocachanclas, a hacer referencia a su patriotismo, una virtud de la que tú, vendepatrias degenerado, careces por completo. “Por aprecio a la Patria”, has dicho. Mira, gilipollas, tonto de los cojones, a ver si te enteras de que los socialistas gobernáis en Valencia con un partido separatista pancatalanista como Compromís, que vais con vuestras vergüenzas al aire y con los pantalones y los calzoncillos bajos ante los separatistas catalanes y vascos, que habéis puesto a los pies de los golpistas a la abogacía del Estado, que estáis entregando a Navarra al separatismo sacando a la Guardia Civil de las carreteras, todo para cobrar a fin de mes y andar todo el día como los chorizos que siempre habéis sido en Falcon, incluso para ir de concierto.



Te has posicionado contra quienes “quieren reescribir la historia”. Ese eres tú y los tuyos. Por de pronto, deberías saber que el socialismo valenciano, eso del PSPV, se puso en marcha con franquistas chaqueteros. ¡Dejad de engañar a los niños! Antonio García Miralles, presidente del PSPV, fue el último jefe del SEU.
No eres ni tan siquiera un ignorante ilustrado, eres, Ábalos, un analfabeto funcional. Aprende un poco. Lee estas declaraciones del canalla de Francisco Largo Caballero, un pozo de odio que provocó la guerra civil. Largo Caballero, el Lenin español, ya el 8 de noviembre de 1933, en un mitin en Don Benito manifestó sin medias tintas su ambición totalitaria: “Queremos todo el poder; vamos a por todo el poder político. Tenemos que luchar como sea, hasta que en las torres y en los edificios oficiales ondee no una bandera tricolor de una República burguesa, sino la bandera roja de la revolución socialista”.


Miserable Ábalos, ignorante cum fraude, Dios quiera que tu partido, el más cleptómano, dañino, corrupto, golpista, guerracivilista y criminal de cuantos ha habido en la historia de España, se vaya yendo irremisiblemente por el sumidero de la historia, con más pena que gloria, y gente como tú o como la Susanita Díaz  se vaya al paro, por qué no, adonde van tantos pobres, no pocos de estos creados a mansalva por la proverbial incompetencia de partidos como el tuyo, Ábalos. 




Asimismo, también como de costumbre y con maneras sectarias, golpistas, guerracivilistas, chequistas, resentidas, destiladoras de odio y conspiradoras contra la legalidad institucional democrática cuando el resultado en las urnas contradice sus intereses partidistas, por lo común dictatoriales o totalitarios (como muestra un botón: Francisco Largo Caballero, el Lenin español: "El PSOE respetará la legalidad republicana solo en la medida en que tal legalidad coincida con sus intereses partidistas y revolucionarios; de lo contrario, iremos al enfrentamiento civil, a la guerra si es preciso, al declarado odio de clases al enemigo, que es la derecha y todo lo que esta implica o significa"), la extrema izquierda está que revienta, está que se sube por las paredes ante el exitazo de Vox en las recientes elecciones autonómicas andaluzas.



De modo que una vez más, la imbécil necedad de los comunistas e izquierdistas más sectarios y recalcitrantes sigue vociferando que "Partido Popular, Ciudadanos y Vox son el nazi-fascismo, la extrema derecha, la avanzada del imperialismo en España contra la revolución siempre pendiente de la clase obrera"...


Desde luego, si no fuese muy grave por demencial y estúpido el análisis de la realidad llevado a cabo por estos descerebrados seguidores de la ideología más criminal de cuantas ha habido en la historia de la humanidad, sería para descojonarse de la risa por todo lo que dicen: excusan al abyecto criminal genocida Santiago Carrillo, o al no menos abyecto y psicópata Ernesto  Che Guevera, o celebran la "rehabilitación" del asesino genocida y golpista contra la legalidad republicana Luis Companys (pocos personajes tan abyectos y siniestros como este en la saña en asesinar a fieles católicos en Cataluña, casi siempre con un sadismo atroz inimaginable -se dieron casos de monjas, curas, seglares y religiosos atrozmente torturados cuyos restos mortales acabaron siendo echados a los cochinos-, durante la Segunda República y sobre todo durante la Guerra Civil), y empero pontifican y pontifican que "Vox, PP y Ciudadanos son la extrema derecha nazi-fascista, el neofraquismo", cuando lo cierto es que Ciudadanos es totalmente socialdemócrata, laicista y globalista en su ideario, aunque en política económica sean liberales.




Menudos paquetes: sigan ustedes con su ignorancia sectaria de comemierdas completamente negados a las cosas de Dios... Desde luego, es difícil ser más sectarios e imbéciles: enemigos de Dios, de Cristo, de la Iglesia, de España...y de la clase obrera, pues el comunismo no dignifica a la clase trabajadora, ¡mentecatos!, muy al contrario, toda vez que los Castro, Hugo Chávez, Maduros y cía de turno humillan a los pueblos que tienen la desdicha de sufrir a tales megalómanos, para acabar enriqueciéndose ellos en el poder.


Y cómo no, no podía faltar: hordas vinculadas a Podemos, a decir verdad instigadas por su líder (para magistrales analistas de la actualidad de la talla de Federico Jiménez Losantos, César Vidal, Enrique de Diego o Roberto Centeno, un sinvergüenza de tomo y lomo este Pablenín, amén de farsante, vividor, totalitario y casta nuevo rico), ya han hecho acto de aparición pública y callejera al grito de "Vox fascista, Vox extrema derecha, abajo los nuevos fascismos..."



Nada de qué extrañarse: "Son la mugre, la basura, la escoria de la sociedad", en palabras del comunicador tinerfeño Pepe López, en efecto directamente referidas a la asquerosa mugre podemita con sus infumables Juan Carlos Monedero (este miserable y pordiosero intelectual ha acusado a Vox del crimen horrendo de la joven profesora zamorana Laura Luelmo, cuando lo cierto es que si en el Código Civil español hubiese vigente la cadena perpetua que propone un partido como Vox para los casos de violadores y asesinos, el mortal verdugo de la jovencísima, llena de proyectos de vida y guapísima Laura Luelmo no habría estado suelto y...), Echeminga Dominga alias Echenique y cía de turno. El PSOE en Andalucía (ojo al dato, nada menos que el PSOE, tal vez el partido más corrupto, golpista, guerracivilista, criminal, conspirador y cleptómano de cuantos ha habido en la historia de España) ha llevado a la región más poblada española al penúltimo lugar en índices de desarrollo económico, solo por delante de Extremadura y muy cerca de Canarias (también en el pelotón de cola en índices de desarrollo), salpicándola con casos de corrupción extrema como el asunto de los ERES o el gasto de dinero de las arcas públicas en fiestas y orgías con prostitutas.



Solo que tal drama parece importar lo más mínimo o ciertamente muy poco a todas estas voces y hordas de independentistas o separatistas (también en Canarias), comunistas e izquierdistas de toda ralea (incluidos casi todos los progresaurios eclesiales, también llamados progreeclesiales: dizque católicos y católicas que, de tan progres que se confiesan y reconocen, comulgan más con los ideales del izquierdismo que con los genuinamente católicos), progres o secularistas, enemigos de Dios, de Cristo y de su Iglesia, enemigos de los valores de la civilización cristiana. Porque ya por toda España berrean que Vox es extrema derecha, fascismo, neofranquismo, facherío…Resultado de imagen de partido podemos


Sectarios e indocumentados, necios a más no poder, y cuyos únicos argumentos consisten en el insulto, el desprecio, la acusación gratuita (dar mamporrera difusión a los lugares comunes del pensamiento políticamente correcto y del laicismo más beligerante) siguen contando con el beneplácito y el aplauso de casi todos los medios de comunicación, instituciones y partidos políticos, vendidos o plegados a los dictados globalistas del Nuevo Orden Mundial. En verdad, sus argumentos progres (insisto, propios de comunistas, izquierdistas, independentistas...) son tan deficientes e infundados, que ni vale la pena entrar a debatir con semejantes energúmenos.




Porque no van más allá del tópico, de la injuria, del acoso, de la marrullería, del totalitarismo de corte leninista-estalinista. Y lo único que obtiene uno de todo intento de diálogo con esta peña es que te acusen, más pronto que tarde, de "fascista, neofranquista,  extremista de derechas, facha..."



No están en la verdad; están en el eje del mal. Por esto mismo en toda Europa tal vez sea por lo que analistas tan prestigiosos como César Vidal, Roberto Centeno o el propio Enrique de Diego pronostican que la izquierda va de culo, lenta pero implacablemente, toda vez que sus mentiras, sus bulos, sus fabulaciones y sus cantos de sirena engañan cada vez a menos personas. De manera que Dios quiera que de un partido como el PSOE, que ha sido en Andalucía durante casi 40 años una maquinaria de corrupción clientelar, no quede, más pronto que tarde en España, ni rastro de sus siglas.



6 de diciembre, 2018. Luis Henríquez Lorenzo: profesor de Humanidades, educador, escritor, bloguero, militante social.

domingo, 28 de octubre de 2018

"Izquierda: vacuidad, laicismo, perroflautismo..."




Lo siguiente que se afirma en un reciente artículo publicado en Rambla Libre ("La izquierda, principal enemiga de la civilización", 28 de octubre, 2018) es precisamente lo que es la izquierda, o en lo que se ha convertido. El dictamen, una vez más se lo debemos al incombustible Enrique de Diego, alma máter de la citada bitácora. Veamos: 

La izquierda bracea y denuncia el ascenso creciente e imparable de lo que denomina la extremaderecha en toda Europa. Ese ascenso corre en paralelo con el hundimiento de la socialdemocracia, en proceso de extinción en Alemania y extinguida en Italia.
La opinión pública de las naciones europeas es cada vez más consciente de que la izquierda es enemiga de la civilización, que bajo su retórica vacua lo que se esconde es un proceso de demolición de nuestra sociedad y un proceso de sustitución demográfico, que es preciso parar para lograr la supervivencia de los autóctonos y de la civilización de la libertad. Para ello, la izquierda debe desaparecer.
La izquierda no es más que una colección de tópicos y un manojo de mentiras para que unos pocos se enriquezcan, como vemos en el caso de Podemos con Pablo Iglesias y Pablo Echenique, dos auténticas lacras políticas. Pedro Sánchez ha vendido a España al separatismo y también al globalismo. Es un claro enemigo de la libertad y de la civilización.
Los líderes de la izquierda viven tras muros, en urbanizaciones privadas, con escolta pagada por el contribuyente, adonde no llegan los problemas que ellos generan. Pablo Iglesias ha pedido y obtenido escolta para él y para su mansión durante las veinticuatro horas del día. Pedro Sánchez es partidario de abrir las fronteras pero vive detrás de los muros bien guardados de La Moncloa. Es todo un ejercicio de hipocresía.Resultado de imagen de perroflautas

Sin embargo, la imbécil necedad de los comunistas e izquierdistas más sectarios y recalcitrantes sigue vociferando que "Partido Popular, Ciudadanos y Vox son el nacifascismo, la extrema derecha, la avanzada del imperialismo en España contra la revolución siempre pendiente de la clase obrera"...

Desde luego, si no fuese muy grave por demencial y estúpido el análisis de la realidad llevado a cabo por estos descerebrados seguidores de la ideología más criminal de cuantas ha habido en la historia de la humanidad, sería para descojonarse de la risa por todo lo que dicen: excusan al abyecto criminal genocida Santiago Carrillo, o al no menos abyecto y psicópata Ernesto  Che Guevera, o celebran la "rehabilitación" del asesino genocida y golpista contra la legalidad republicana Luis Companys, y empero pontifican y pontifican que "Vox, PP y Ciudadanos son la extrema derecha nacifascista", cuando lo cierto es que Ciudadanos es totalmente socialdemócrata, laicista y globalista.

Menudos paquetes. Desde luego, es difícil ser más sectarios e imbéciles.

De manera que con esta tropa es la misma historia de siempre, sí, tan alucinada y descerebrada ya que acabamos de tener noticia de cómo recientemente grupúsculos de animalistas por Madrid se manifestaban contra el jamón serrano, en las inmediaciones del Museo del Jamón, esgrimiendo el muy eminente argumento de que comer carne animal es igual a asesinar.


Entonces (así las cosas), consideremos el destino del voto católico: votar por PSOE, Izquierda Unida, Equo, Podemos (y resto de marcas izquierdistas y del naufragio comunista) es votar aborto sí, eutanasia sí, homosexualismo y movidas LGTBIQ sí, laicismo sí, feminismo radical o de la tercera ola sí, globalismo sí, ideología de género sí... Y es asimismo votar paro, precariedad laboral, subida de impuestos, desigualdad social, corrupción politiquera... De manera que así las cosas, ¿qué sentido, razón de ser, utilidad, prudencia o coherencia moral tiene que un católico vote por cualquiera de estas formaciones políticas antedichas?


O dicho con otras palabras: si votar por partidos de izquierda ni siquiera significa garantizar notables cotas de justicia social, solidaridad y reparto de la tarta de la riqueza -más bien, ya sabemos, suele significar justo lo contrario-, y considerando que en lo estrictamente moral y axiológico la izquierda representa la conculcación de los valores antropológicos y teológicos propios del Reinado Social de Cristo, ¿por qué y para qué dejarse convencer por las promesas, cantos de sirena y planes de revolución social urdidos por podemitas, sociatas y demás familia?Resultado de imagen de perroflautas


Con todo, pese a palmarias evidencias como las anteriores presentes y perfectamente rastreables en los cuatro  párrafos reproducidos, sigue habiendo izquierdistas, yo diría sin pestañear que muy sectarios y guerracivilistas, que porfían en la cantinela o mantra de calificar invariablemente a Francisco Franco de "dictador criminal y asesino, genocida y represor que perpetró un golpe de Estado contra las libertades democráticas de la Segunda República y el Frente Popular y bla bla bla..." 

Recuerdo que en uno de mis primeros relatos (como tantos otros míos, el citado duerme el sueño de los justos, a la espera de tiempos más oportunos y propicios para la labor de poda, pulido y corrección), rememoro un tiempo nebuloso y mítico de mi infancia en que la figura de Franco era para los niños como la de un semidiós: a Franco lo percibíamos desde nuestro imaginario de niños y en la recta final de su régimen autoritario o dictadura (a la muerte del aclamado como el Generalísimo iba a cumplir yo 9 años), como el dueño de las vidas de todos y el propietario de todas las cosas habidas o pensables.


De todas: Franco percibido como el dueño absoluto de todas las cosas y con poder sobre todas las personas.


Sí: percibíamos que el solo nombrarlo era motivo de miedo, y a mí ya a esa edad me parecía que Franco y comunismo eran conceptos completamente antagónicos, y hasta es posible que llegara a mis oídos infantes y escolares la noticia de que algún maestro algo "comunista" andaba por el colegio. Luego, con el correr de los años (lustros, décadas...), tras militancias de índole izquierdista, tras algunas lecturas y otras tantas experiencias vitales, y desde luego desde la toma de conciencia de mi identidad católica, he alcanzado una comprensión bien distinta de la figura de Francisco Franco Bahamonde.


Pero a lo que íbamos o en lo que estábamos: hoy día me parece que es del todo inútil pretender un diálogo con una mayoría de izquierdistas, tampoco afirmo que sean todos, toda vez que la verdad les importa un bledo; lo que sí parece importarles es el servilismo a la propaganda comunista, amparada siempre por la demagogia (Lenin dixit: "Los conceptos de verdad o mentira dependen de cuánto los citados convengan a los intereses del Partido, de la Revolución"). Lo que les importa es simular pasión por la justicia social, la solidaridad y el amor a los pobres, al tiempo que con la más descarada de las desvergüenzas van engordando sus cuentas corrientes y, con el correr del tiempo, más pronto que tarde acaban mudándose a vivir a zonas residenciales propias de las clases más pudientes de la sociedad, de las clases "burguesas" a las que se supone que odian (el marxista odio de clases).

La izquierda de inspiración marxista es especialista en crear sociedades que a las primeras de cambio acaban empantanadas en la miseria, la precariedad laboral, la falta de oportunidades de progreso e iniciativa personal, la falta de libertades, la opresión, la represión, el crimen... Pero les da igual, toda vez que siempre parecen dispuestos a echar mano del consabido chivo expiatorio: "Franco, la derecha, el fascismo (nombres, iniciativas o conceptos como Vox, el reconocimiento de los logros del franquismo, las loas al movimiento identitario y otras similares, son etiquetados ipso facto de ser realidades fascistas y de extrema derecha) vienen a ser causantes de todos los males de la sociedad actual... y de la venidera en España, Europa, todo Occidente...".

A decir verdad, si estos farsantes no vivieran a menudo a cuerpo de rey del erario público en las instituciones, a uno deberían importarle muy poco o nada los nombres de Pedro Sánchez, Pablo Echenique, Rita Maestre, Juan Carlos Monedero, Susana Díaz, Ada Colau, Manuela Carmena, Gerardo Pisarello o la mismísima monja cojonera argentina Lucía Caram, que es el perejil de todas las salsas progres... Pero es que están ahí, destrozando todo lo que tocan, esto es, pauperizando al país en tanto ellos prosperan y se enriquecen. Y esto, desde luego, no y no y mil veces no.


No y mil veces no. Dicho con fuerza reproduciendo una vez más dos párrafos de otro muy brillante artículo de Enrique de Diego, uno más y ya ni se sabe el número de tantos o de cuántos van salidos de la mente y de las luengas barbas de este controvertido periodista español que se permite llamar en sus escritos chulo puta al presidente Pedro Sánchez, quien si es chulo puta para el impulsor de Rambla Libre para mí es una plaga bíblica, un cáncer de Estado, un marrullero sin escrúpulos, un dinamitador de España, un oportunista que por seguir en el poder -adonde nunca debió llegar- es capaz de hacer las trampas, demagogias y pactos ruines que falta hagan. Son estos:


Con la mierda de historia que tiene ese partido de asesinos y psicópatas que es el PSOE, empezando por el terrorista de Pablo Iglesias que proclamó en sede parlamentaria su intención de atentar contra Antonio Maura, lo mejor es que, mentiroso compulsivo, tuvieras tu bocaza bien cerrada. Con esa fatuidad inconsistente que te caracteriza te has hecho la siguiente pregunta retórica: “¿cómo se puede permitir a la familia Franco sentirse orgullosa de esa herencia?”. Mira, mentecato, la familia Franco puede sentirse orgullosísima de su abuelo. Francisco Franco no es letra menuda, ni una nota a pie de página de la historia, sino una de las figuras españoles y mundiales más decisivas y egregias del siglo XX, y eso no lo puede evitar vuestra infinita mediocridad chequista. El historiador Paul Johnson, autor de “Tiempos modernos”, la mejor obra sobre el siglo XX, dice de Franco que “debe considerárselo una de las figuras públicas más eficaces del siglo”, lo describe dotado “de una gran inteligencia y formidables reservas de coraje y voluntad”. Y enfatiza que “los nacionalistas triunfaron principalmente gracias a la capacidad y el criterio de Franco”. Y eso es lo que lo que os jode, que ganó la guerra, el único que venció al comunismo, y os jode porque querías asesinar a media España, en vuestra pulsión de psicópatas ideológicos, para luego asesinaros entre vosotros, aunque ya comenzasteis en la primavera de 1937 aniquilando a los del POUM y despellejando a Andreu Nin, curiosamente en el Palacio del Pardo, por el archiasesino Alexander Orlov. 

En cuanto al franquismo, bien orgullosa puede estar la familia Franco. Y orgullosos y agradecidos están la mayoría de los españoles. En la encuesta de Sigma Dos para El Mundo, de junio, el 54,3% de los españoles consideran que no es el momento de exhumar el cadáver de Franco, entre ellos el 41,4% de los votantes socialistas. El impresionante balance de los datos concluyentes de la gestión de los gobiernos de Franco –cualquiera de sus ministros parecía un estadista al lado tuyo, Ábalos, y del chulo puta de tu jefe- la ha hecho con la magistral frialdad de los datos Roberto Centeno, artículo que está en Rambla Libre y al que remito a los lectores, que fue primero publicado en El Confidencial, para ser luego retirado y borrado y vetado su autor, porque en eso de perseguir al discrepante este sistema no tiene que recibir lecciones de nadie. Reseño algunos datos: la media de crecimiento del PIB fue del 6,6% entre 1950 y 1975, la clase media española representaba el 56% en 1975 y ahora ha caído al 43%, la clase baja había menguado hasta el 39% y ahora habéis conseguido hacerla crecer hasta el 54%; la renta per cápita del español estaba en el 83% de la europea y ahora en el 71%. No había paro (3%), no había deuda pública, no había impuestos directos (ni IVA, ni IBI, ni matriculación, ni donaciones y sucesiones, ni IRPF, ni Sociedades, ni cuernos en vinagre). Y como dice Roberto Centeno:  “Creación de la Sanidad Pública Universal ( todos los grandes hospitales públicos estaban construidos en 1.975, y Franco murió en uno de ellos). Creación de la Pensión de Jubilación, y también de la de Viudedad. Establecimiento de la edad obligatoria de Jubilación. Establecimiento del salario mínimo interprofesional. Creación del Auxilio Social, sembrando España de comedores gratuitos para los más necesitados. Creación de Escuelas de Formación Profesional. para el comienzo de la vida laboral, etc. Construcción de todos los pantanos posibles de España, etc.” Bebemos y regamos de los pantanos de Franco, porque si fuera por las desaladoras de Zapatero y los socialistas seríamos ya un desierto, especialmente la Comunidad Valenciana.         ("Carta abierta a José Luis Ábalos: Los Franco pueden estar muy orgullosos y tú debes pedir perdón": 2/11/2018).


Solo que en estos tiempos de radical apostasía, tiempos apocalípticos, el miedo, la contumaz costumbre, la lobotomización y la imbecilización generalizada de los espíritus (conozco perroflautas metidas hasta los tuétanos en el movimiento animalista que, desde el ateísmo, descreen del destino eterno de las almas de sus seres queridos humanos y a la vez sufren traumas, lutos y duelos por sus mascotas muertas, a las que por supuestísimo invocan como fallecidas), no es descartable en modo alguno que puedan frenar nuestro sueño común identitario.

A mi juicio -que me parece coincide plenamente con el de cada vez más cantidad de personas-, ahora que se acercan las elecciones autonómicas andaluzas, el Partido Popular, a pesar de la probable honradez de su nuevo líder Pablo Casado y del buen hacer de solo Dios conoce qué cantidad de sus militantes, allegados, votantes, simpatizantes todos -digo probable, de seguro quién sabe si...-, por su alta traición a los ideales identitarios, cristianos y patriotas, se merece un descalabro electoral solo similar al que se merecen los sociatas de la PSOEZ con la ultracorrupta, demagoga y seudosocialista Susana Díaz, más la mugre podemita que no falte, neomarxista y bolivariana, enemiga de Dios y de España. Toda esta izquierda podrida y demagógica contraria a la verdad y a la justicia social, y cuyo único programa es hoy por hoy el alcanzar el poder para aplicar la mamandurria, el socialismo clientelar, lo que se merece es que se vaya diluyendo con más pena que gloria por el sumidero de la historia.


1  de noviembre, 2018. Luis Henríquez Lorenzo: profesor de Humanidades, educador, escritor, bloguero, militante social.